César Rito Salinas
Cuando las barcas hienden los mares
Testear los vientos, ventear mar adentro
Me acompañan bestias de media agua,
asombros -aquello que no se sostiene.
¿Qué puedo hacer ante lo que se hunde?
Escansión, dijo el poema. Poema
¿Te quedas o te vas?
Divide a tercios, el poema es ecuación.
La ruptura será principio del rostro.
Cunando digo “el equipo defiende bien”,
¿qué digo? ¿Qué juegan con el carro completo
metido en su propia cancha? ¿eso es el juego?
La lengua no alcanza, se contrae, divide.
Para alcanzar los mares navega, rema,
aparta las aguas, Jonás.
Poema, poemea, Meopa.
La Teoría del Poema de Santa Sonia
Hay muchas palabras delante de ti,
dice Mario Montalbetti en su teoría del poema
El Cuatro Está Solo, donde aclara el misterio
que acompaña al poema, los poetas,
Pero Montalbetti llega tarde, con muchas palabras
para aclarar el poema, cunden frente a él.
¿Qué es un poema? ¿Quién lo escribe?
¿En este tiempo escribimos poemas?
¿Cuándo se escribe un poema?
¿Para qué escribimos poemas?
¿Dónde termina el poema?
El lenguaje es el enemigo número uno del sistema.
El poema nunca se enseña, lo que se enseña
son guías turísticas.
Puedes poner Dante, Petrarca, Lope o Lorca
o el nombre de cualquier ciudad enorme.
Montalbetti acude al centrocampista del Riber,
Juan Ramón Riquelme.
¿Qué hacer? En México no tenemos genios del futbol.
Santa Sonia concreta el tema: desayuna.
Si tienes fuerza al inicio del día
podrás tomar la dura encomienda,
incluso escribir poemas
(y un cielo de negras aves se agita sobre el parque Juárez, Juchitán).