Cuauhtémoc Blas
No cesa la violencia en San Martín Itunyoso, en la zona del grupo étnico con más violencia en Oaxaca, el triqui. Desde la gestación del actual ayuntamiento de esa población, hubo no solo desacuerdos y disputas, sino muertos y heridos. El gobierno saliente de Murat no se dio por enterado, tampoco el gobierno entrante que llegó sin estrategias para detener la violencia, lo que es claro a la luz de estos hechos.
El 5 de octubre de 2022, fue ejecutado en Itunyoso, en plena asamblea indígena, el expresidente municipal, Pedro Díaz Martínez. Otras dos personas quedaron heridas, en un enfrentamiento entre grupos antagónicos que pelean literalmente a muerte el control del municipio.
HISTORIA CRIMINAL QUE SE REPITE
Un año después, el 18 del mismo mes de octubre, asesinan al síndico municipal, Andrés Guzmán Rodríguez, junto con su esposa y su hija. Fueron interceptados en el vehículo donde viajaban de la ciudad de Oaxaca a su pueblo, acribillados e incinerados. Regresaban, precisamente, de una reunión en la Secretaría de Gobierno estatal (Sego), donde los dos grupos rivales no pudieron dirimir sus desacuerdos.
No podía ser de otra manera, las miradas voltearon de inmediato hacia quien comanda el grupo antagónico, el presidente municipal de Itunyoso, Santiago Miguel López. Una de las rivalidades señaladas por la población, es que el síndico asesinado denunciaba el desvío de recursos municipales del presidente.
“PLEITO POR EL PODER Y EL DINERO”
Jesús Romero López, titular de la Sego, declaró a la prensa que ese “pleito es por el poder y el dinero, no por servir al pueblo, se pelean la chequera, el manejo del dinero, las obras. Esa es la pugna, no es un proyecto social o político de buscar el beneficio de la comunidad”. También informó que un día antes, por la tarde, fue asesinado en la misma población, Rodolfo L.G., cuñado del presidente.
Antes, el 2 de octubre el presidente sufrió un atentado donde falleció su sobrina y otra persona. El ataque, acusó Jesús Romero, fue del tesorero municipal, miembro del grupo del síndico asesinado. El 3 de octubre se dio otra agresión a balazos con el saldo de una mujer herida. También informó que durante el proceso electoral fue asesinado un partidario del presidente municipal. (Noticias, viernes 20 de octubre de 2023. Pág. 9)
El titular de la Sego, no tiene, por supuesto, toda la responsabilidad de este hecho, solo parte pues siendo tan evidentes las enconadas rivalidades de esos grupos, alguna medida urgente debió tomar, no que hasta ahora anuncia que pedirá la desaparición de poderes en ese municipio. ¿Qué tan mala intermediación se habrá dado que los ánimos se fueron hasta un extremo radical, saliendo de esas oficinas de gobierno? Con este antecedente, ¿ahora en dónde hallarán los pueblos un intermediario oficial que conduzca a una negociación salvadora?
LA IMPUNIDAD ESTIMULA VENGANZAS
Solo de manera excepcional se detiene a los responsables de las muertes y masacres sucedidas en estos pueblos de usos y costumbres; de hecho, otro de esos usos es la impunidad: el que cayó, cayó. No se espera que se haga justicia con el derecho, la predominante, es la que se hace por propia mano. Finalmente, solo un rato dura el escándalo, no tarda mucho en que esas etnias sean olvidadas de nuevo. Como dice Roger Bartra:
“Hay hombres cuya vida no vale mucho a los ojos de los amos: la muerte de un indio mexicano, lo mismo que de un campesino en Biafra o un intocable en Calcuta, ocurre en el seno de la masa indiferenciada; esa muerte puede alcanzar proporciones estadísticas monstruosas, pero no amenaza directamente al civilizado.”
No hay quien se ocupe de esta violencia creciente en los pueblos indígenas oaxaqueños. Asesinatos que junto con la pobreza (que es la mayor violencia) constituyen sus principales problemas; luego la violación exagerada e impune de los derechos humanos ahí, luego la emigración… Pero políticos e indigenistas voltean para otro lado, discursean y escriben demagógicamente de tequios, guelaguetzas, comunalismos y seudomulticulturalismos. Rentables distractores, mientras aumentan violencia y muertos.
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