Bernardo Vásquez Sánchez fue asesinado por exigir respeto para su comunidad. Ingeniero agrónomo, defensor del territorio en San José del Progreso, compañero de lucha, enérgico, solidario.
La defensa del agua y el ambiente fue su principal preocupación desde 2008, año en que la empresa minera canadiense Fortuna Silver Mines se instaló en su comunidad ofreciendo bondades y beneficios: empleo, pavimentación de calles y un centro de cómputo. El desarrollo había llegado a San José del Progreso.
Bernardo hábilmente supo leer el contubernio existente entre la empresa minera y las autoridades de los tres niveles de gobierno en México, por lo que inmediatamente se reunió con ciudadanas y ciudadanos de su comunidad, su principal premisa fue la organización del pueblo.
Ante la indiferencia de las autoridades y la creciente preocupación de las comunidades de Valles Centrales por el agua, el territorio y el ambiente, ciudadanas y ciudadanos se organizaron en la Coordinadora de Pueblos Unidos del Valle de Ocotlán (COPUVO), decidiendo con base en su derecho a la libre determinación frenar y clausurar definitivamente el proyecto minero “San José” en 2009.
En 2009 las comunidades de San José del Progreso, el Cuajilote, Maguey Largo y Magdalena Ocotlán decidieron clausurar el proyecto minero, ante esta decisión comunitaria, la respuesta del Estado fue brutal: mediante un operativo de 1200 policías desalojaron el plantón violentamente, afectando principalmente mujeres y niñxs. Bernardo fue detenido y golpeado, no obstante, por la presión social fue liberado.
De 2009 a 2012, Bernardo y miembros de la COPUVO denunciaron la existencia de grupos armados contratados por la empresa minera, ninguna autoridad respondió ni se responsabilizó ante las denuncias presentadas.
En enero de 2012, en una emboscada operada por la policía municipal de San José contra ciudadanas y ciudadanos del mismo municipio fue asesinado Bernardo Méndez, compañero de lucha, integrante de la COPUVO. Dos meses después, en marzo de 2012, en una emboscada, en la carretera federal 175, a la altura de Santa Lucía fue emboscado Bernardo Vásquez, en este ataque también fueron heridos de gravedad Rosalinda Dionicio y Álvaro Andrés Vásquez.
Ninguna persona debería perder la vida por defender lo propio, por defender a su comunidad. Ningún homicidio debería quedar impune. Ninguna empresa que violenta derechos humanos y asesina defensores debería seguir operando.
Bernardo denunció este panorama y 10 años después lamentablemente no ha cambiado: En México las empresas mineras cuentan con el beneplácito del Estado. El estímulo para Fortuna Silver Mines en 2021 fue la condonación de 10 años más de explotación comercial en los Valles Centrales. Para Bernardo Méndez, Bernardo Vásquez y sus familias, no existe ningún avance en las investigaciones, ninguna persona ha sido detenida y juzgada por estos crímenes.
Pese a la ineficacia del Estado y su respaldo a las empresas mineras, las comunidades de Valles Centrales no olvidan. Bernardo es semilla de vida, su dignidad trascendió las fronteras de San José, su compromiso fue esparcido por el territorio como arroyo, como río. Doce comunidades de Valles Centrales se han organizado en el Frente No a la Minería por un Futuro de Todas y Todos, fortaleciendo sus asambleas y su organización, determinaron hacer valer sus derechos, al Estado y a la empresa minera ¡Aquí decimos Sí a la Vida, No a la Minería!
Texto de Servicios para una Educación Alternativa, EDUCA A.C
