Esta es la crónica de una efeméride que el gobierno no celebró. Algo se le olvidó a los gobiernos estatal y municipal este segundo jueves de julio, el Día Nacional del árbol.
Los días en la ciudad pasan sobre asfalto y hojas, calores y aguaceros en un julio que, por decreto presidencial de 1959 celebra el Mes del árbol.
Pero en el caso de los festejos a la naturaleza, el gobierno morenista sufre de amnesia.
El jueves nublado se anima, entre calores, con la cercanía del día de quincena. En la ciudad el gobierno marcha en sentido contrario, empecinado en hacer política que culpe a las anteriores administraciones de las decisiones equivocadas, que llevan a la sociedad toda a una catástrofe ecológica.
El gobierno está a favor de pavimentar calles, hacer banquetas, pareciera que ellos son empleados de las cementeras que buscan la pavimentación masiva como forma de obtener ingresos. En el mes de julio nada anuncia el festejo de este decreto que celebra a los árboles el segundo jueves del mes de julio.
En lugar de los árboles anunciaron con bombo y platillo el Día del abogado.
El árbol urbano observa la forma en que año tras año, mes con mes, la política del municipio, que da palos de ciego en torno temas tan álgidos como clima y basura; olvida que una acción preventiva contra el cambio del clima, es plantar, conservar y otorgar más espacios para la siembra de los árboles en nuestra ciudad.
Y promover una cultura ciudadana de preservación de los árboles.
El falso debate que se dio entre progreso-urbanización y conservación de los árboles urbanos llegó a su final, los laureles del zócalo están infestados por la plaga y el municipio deja de realizar acciones que le corresponden, para su cuidado carecen de presupuesto.
En este tema no se trata de echar la culpa del descuido en que se encuentran los árboles del Centro de la ciudad a gobiernos pasados, la situación obliga a una puntual política de conservación de los ejemplares con los que contamos.
Si la administración busca difundir la cultura de fiesta y tradiciones que representa julio con la Guelaguetza, bien podría iniciar los festejos al celebrar el Día nacional del Árbol, pero padecen amnesia.