César Rito Salinas
La vida dura que llevó mi madre al pensar
en los dos tipos de la verdad que existen
para los humanos: la verdad la verdad,
y la verdad.
Intento repetir sus palabras, pero no tengo
las artes de ella.
No obstante, sigo sus consejos, escribo.
La verdad la verdad es aquella
que la gente siente y oculta, la que no
puede ver la gente, pero existe.
Una pena, por ejemplo. Un amor,
La serena alegría. Y la verdad a secas,
aquella que todo mundo puede mirar.
Una casa, por ejemplo. Para ser feliz
en esta vida, me dijo un día allá
en el barrio, debes llegar a comprender
la verdad la verdad,
pero debes estar atento a la verdad;
para que no sufras tanto,
me dijo.