23.9 C
Oaxaca City
lunes, septiembre 16, 2024

Ser solidarios en el arte y en la vida

Reportajes

Ser solidarios en el arte y en la vida

Ser solidarios en el arte y en la vida, es un precepto del humano y el artista. La más de las veces se expresa que el artista tiende más a lo individual, a lo personal; pero por experiencia sabemos que se impone lo humano sobre lo artístico, cuando la situación lo amerita. En Oaxaca hemos vivido varios casos donde la urgencia obliga a franquearse del lado justo, frente al abuso de grupos de poder y autoridades lamentables, la respuesta en muchos casos ha sido notable y de importante valor.

Para estos casos hemos notado algunas ausencias de personajes que pregonan ser adeptos de la canción tradicional oaxaqueña, y se asumen como sus mejores intérpretes, así como conocedores de su valor social y cultural. En particular de un icono que comparte, se supone, identidad y origen con Ángeles Cruz, pero que para este caso no se notó el apoyo abierto y la repercusión que hubiera tenido.

Sin ser mal pensados, quizá otros compromisos menos del orden utópico y más del tema material logran el incumplimiento de esa expectativa.

Hablo de Ángeles Cruz porque su caso implica a una comunidad, a su familia y, sobre todo, a la integridad física y moral de alguien que ha dado un aporte importante a la salud cultural del Oaxaca de ahora, tan necesitado de eso. Otro hecho es el relacionado con la Saxofonista María Elena que fue objeto de una agresión injustificada y aberrante. Por suerte la presión social hizo que la justicia equilibrara un poco su balanza para evitar que fuera objeto de mayores agresiones.

Me atrevo a pensar que tanto en lo artístico como en lo social en Oaxaca siguen contando el status y la clase, en pro de los beneficios y los privilegios. En función de eso, las secretarías que corresponden otorgan contratos y funciones a un cartel invariable de intérpretes y autores de calidad discutible, porque se hace en función de eso, y no de los atributos y capacidades. Es otra de las constantes en el tema de nuestra identidad como artistas del pueblo o de la élite. Por eso también la actitud solidaria o la posición indiferente.

En tanto la situación vaya en ese tono, le seguiremos apostando al canto combativo y al arte insurgente. Desde ahí nos seguiremos pronunciando a favor de lo justo como desde los tiempos de Judith Reyes y José de Molina. Esa decisión también nos permite expresar y hacer patente nuestro apoyo convencido a las personas y las causas en donde los gobiernos hacen lo que el chololo: enconcharse para no atender ni resolver, con su oferta de diálogo sordo. Va o sigue nuestro eterno adiós al contrato rogado, nuestra voluntad tiene su temple en un movimiento popular que no invoca favores o servicios bajo condición humillante. Sigue nuestra voz a la orden del que lucha por su dignidad y por su honra.

Fernando Amaya

- Advertisement -spot_img

Te recomendamos

- Advertisement -spot_img

Últimas noticias