María Fernanda Hernández Morales, es una joven estudiante. Aspira a ser abogada. Estudia en la Benemérita Universidad de Oaxaca. Participa constantemente en foros, concursos de oratoria y mesas con temáticas jurídicas y politica. Hizo dos estancias de investigación en Litigio Estratégico Indígena A.C.
Mafer, ¿cómo te describes?
Como una mujer joven indígena, de este tiempo, que busca incidir en un cambio. Estoy preocupada por el medio ambiente, por la situación de inseguridad del pais, por el alcance de las reformas constitucionales en materia de justicia. Pero sobre todo por la violencia cotidiana hacía la mujer. Pretendo, a través del litigio se puedan visibilizar las situaciones que han colocado en cuestiones de vulnerabilidad a las mujeres y a las personas indígenas.
Y que, a través de mi voz, se puedan escuchar nuevas perspectivas con respecto a lo que sucede actualmente, analizar la problemática social y lo más importante, busquemos las soluciones d elas problemáticas que se han presentado durante años.
Esta pregunta está conectada con la anterior, ¿quién es María Fernanda Hernández Morales?
María Fernanda, es una joven de 20 años, que se autoadscribe indígena, estudiante del séptimo semestre de la licenciatura en derecho, que le gusta la oratoria y luchar por las causas justas.
Provengo de un entorno familiar fuerte. En este entorno he sido educada en el trabajo duro y en la perseverancia. En pcas palabras, podría definirme como una mujer fuerte, feminista y que busca la plena igualdad, sin techos de cristal, y con oportunidades.
¿Cómo nació su afán por estudiar derecho?
Desde la secundaria empecé a darme cuenta de mi entorno. Aprecié injusticias en un estado tan asimétrico como Oaxaca. Aunque desde niña siempre me gustó la literatura universal y latinoamericana. En el bachillerato, empecé a acercarme a la filosofía y a la ética. Mi aspiración era ser maestra universitaria para enseñar a los jovenes, pero ahora me visualizo en el litigio, en la política, dando la pelea en todos los frentes. Y sueño ser presidenta de la República. Hoy es perfectamente factible y posible.
Pero volviendo a la pregunta, en el tercer año de la secundaria, no en otra profesión, sino, en ésta y la verdad, que en los seis semestres que llevo estudiando puedo afirmar que no me equivoqué de carrera.
¿Qué es lo que más le ha gustado de su formación académica?
R: Desde que empecé a estudiar derecho, lo que más me ha gustado, es primero, descubrir que tengo la virtud del enfocamiento. Cuando me propongo las metas, las consigo a través del cariño y dedicación. No es un sacrificio dedicarle las horas de estudio que le dedico a las materias que llevo. Además, en Litigio Estratégico Indígena A.C. elaboré y dí seguimiento a varios juicios de amparo de relevancia nacional.
También me he dado cuenta que poco a poco lo que había imaginado lo estoy construyendo y creando. Creo que en el futuro buscaré estudiar un doctorado en el extranjero.
Con respecto a lo que he visto en la carrera, me han gustado las materias procesales, porque ya se encuentran más enfocadas en la realidad y practicidad.También me gustan las materias con sustento filosófico las relativas a Derechos Humanos y el derecho penal. Y sobre todo la materia de amparo que se ha revelado como un instrumento de cambio social.
¿Se puede hacer litigio ambiental siendo estudiante?
Es importante indicar que cualquier persona puede litigar en favor de su comunidad. Cualquier persona puede promover amparo para rescatar un río, una manglar, un bosque o un humedal.
Claro que se puede: siendo estudiante he promovido dos juicios de amparo enfocados en la materia ambiental. En mis estancias academicas en Litigio Estratégico Indígena A.C. he promovido dos juicios de amparo en materia ambiental que sin duda sentarán precedentes en la materia.
¿Qué litigios ambientales ha postulado usted?
El primero que presenté fue el juicio de amparo enfocado en la aplicación del Acuerdo de Escazú, específicamente con el propósito de obligar a la publicación de un listado de las zonas contaminadas, tipo de contaminante, para garantizar el derecho al acceso a la información ambiental. Tiene como finalidad promover la participación política en temas ambientales.
De igual forma, el segundo litigio ambiental, estaba enfocado en obligar a la dependencia estatal ambiental a publicar el Plan de Desarrollo Urbano y Ecológico. Los dos litigios se encuentran todavía en trámite.
¿Se puede litigar para la defensa de los derechos de la mujeres?
R: Sí. A través del juicio de amparo. Este juicio es un isntrumento efectivo para garantizar, proteger y respetar los derechos de personas en situación de vulnerabilidad.
En este caso, es necesario identificar la causa generadora de la violación a derechos humanos, y promover el amparo.
En mi caso, con Litigio Estratégico Indígena, promovimos dos juicio de amparo: uno, para obligar a la entidad federativa a traducir a las lenguas indígenas de la Alerta de Violencia de Género contra la Mujer y, dos, la Ley para una Vida Libre de Violencia para las Mujeres en el Estado de Oaxaca.
¿Qué relación tiene la oratoria con la búsqueda de la justicia?
Tiene mucha relación. Los temas propuestos en los concursos de oratoria, tienen que ver con temas de problemáticas que se presentan cada día.
En los foros y concursos, se expresan las ideas y el ánimo de luchar por causas justas, y relacionarte con personas que coinciden en los mismos objetivos.
La oratoria, proporciona la habilidad para sistematizar las ideas, facilidad para expresar los argumentos. Esta herramienta puede ser utilizada tanto en la palestra como en ele juzgado.
La oratoria y el litigio buscan la defensa y protección de los derechos humanos. Además, promover cambios sociales e influenciar en la legislación local.
Y que, a través de eso, se generan debates en la sociedad, para que se puedan generar cambios concretos con respecto a los problemas que se han presentado desde hace muchos años.
En Litigio Estratégico Indígena aprendí que se puede hacer cambio social en México a través del juicio de amparo.