El dirigente del Centro de Derechos Humanos y Asesoría a Pueblos Indígenas (Cedhapi), Maurilio Santiago Reyes, informó que una niña de tres años de edad víctima del desplazamiento forzado en dos comunidades de San Esteban Atatlahuca, murió el pasado domingo 27 de marzo de 2022 a causa de un alto grado de desnutrición y problemas de diarrea.
La menor que se llamaba Benita Hernández Bautista, detalló, falleció en el Hospital Rural del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS-Bienestar) que se encuentra en la ciudad de Tlaxiaco, población de la Mixteca de Oaxaca.
“La niña Benita Hernández Bautista fue desplazada violentamente conjuntamente con su familia el día 22 de octubre del 2021, ya que autoridades de San Esteban Atatlahuca quemaron sus casas, por lo cual diversas familias de Guerrero Grande y Ndoyonoyuji, fueron desplazadas”, recordó.
Maurilio Santiago recordó que durante esos hechos, también fueron quemadas más de 100 casas quemadas, lo que en un inicio produjo el desplazamiento interno forzado de más de 300 familia de las comunidades de Ndoyonoyuji y Guerrero Grande.
Y aunque algunas familias de Guerrero Grande han regresado a su comunidad, se encuentran viviendo en la iglesia de esa localidad y en casa de sus familiares y vecinos ya que sus vivienda fueron quemadas.
“Por todos estos hechos con fecha 23 de diciembre del 2021, la Comisión Interamericana de Derechos Humanos emitió medida cautelar al Estado Mexicano MC-1050-21, en la cual refiere concretamente lo siguiente: Proteger los derechos a la vida e Integridad personal de las familias indígenas de las comunidades de Guerrero Grande y Ndoyonuyuji a través de medidas culturalmente adecuadas dirigidas para proteger sus derechos y en especial de los niños, niñas, mujeres y personas mayores”.
También mencionó que el 31 de diciembre del 2021, el Comité Contra la Desaparición Forzada de la ONU emitió acción urgente solicitando al estado mexicano la búsqueda inmediata de los señores Miguel Bautista Avendaño, Donato Bautista Avendaño, Marco Quiroz Riaño, Mayolo Quiroz Barrios y de la señora Irma Galindo Barrios e investigación de su alegada desaparición forzada.
“La situación de riesgo prevalece en la comunidad indígena de Guerrero Grande, siendo el caso que en la noche del día 31 de diciembre del 2021, fueron quemadas las casas de los señores Lucas Riaño Sandoval, Bartolomé Barrios Reyes, Juana Bautista Sandoval, Porfiria Hernández Bautista, María Hernández Bautista y Cornelio Hernández Bautista”.
El dirigente de la Cedhapi aseguró que con este desplazamiento forzado y con la muerte de la menor de tres años a causa de desnutrición se violentan los derechos de los niños y de las niñas consagrados por los artículos 2 y 24 de la Convención sobre los Derechos del Niño.
Por ello, exigió el cumplimiento a la medida cautelar otorgada por la Comisión Interamericana de Derechos Humanos y apoyo humanitario urgente a las familias desplazadas de Guerrero Grande y Ndoyonoyuji en el marco internacional del Derecho Internacional Humanitario.