Los priistas ganan terreno en Morena. Con Claudia Sheinbaum la incorporación es directa y no simulada a través del Partido Verde Ecologista de México (PVEM); pero, además, ha abierto el partido a personajes políticos vinculados al ex gobernador de Oaxaca, Ulises Ruiz Ortiz, y al ex presidente Enrique Peña Nieto, ambos, acusados de represión y crímenes de lesa humanidad.
Su decisión no fue bienvenida por un gran número de simpatizantes y militantes de Morena, quienes abuchearon en el auditorio Guelaguetza a estos expriistas durante la firma del “acuerdo de unidad por la transformación”.
Esta reacción fue condenada por la misma Claudia Sheinbaum al callar en reiteradas ocasiones a los asistentes a su acto político en la capital oaxaqueña: “Me van a escuchar o no”, increpó a los asistentes ante los abucheos.
Según la candidata presidencial de Morena, la apertura del partido a los priistas no significa que traicionen los principios de no mentir, no robar y no traicionar; además, recordó que el presidente de la república, Andrés Manuel López Obrador, también lo hizo cuando incorporó a un grupo de empresarios que habían hecho una campaña en su contra en la que lo señalaban como un “peligro para México”.
“Convocó a mucha gente que no era del movimiento, incluso de otros partidos políticos y decidieron abandonar y conjuntarse con el movimiento, para aquellos que ya no fueran de acuerdo con lo que estaba pasando, fueran parte de la transformación”, aseguró.
Entre los nuevos invitados a la campaña de Claudia Sheinbaum destaca Eviel Pérez Magaña, quien se desempeñó como secretario de Obras Públicas en el sexenio de Ulises Ruiz, e incluso, fue su candidato a gobernador por el PRI; elección que perdió con el candidato de la coalición PAN-PRD, Gabino Cué Monteagudo.
Ulises Ruiz – quien ahora busca la candidatura independiente a la Presidencia de la República – aún enfrenta denuncias por crímenes de lesa humanidad durante el conflicto social, político y magisterial de 2006 y 2007.
Eviel Pérez también fue titular de la entonces Secretaría de Desarrollo Social (Sedesol) en el gobierno de Peña Nieto, en un contexto en el que se destapó la “estafa maestra” que consistió en operaciones simuladas con empresas fantasma para desviar más de cinco mil millones de pesos.
También fue abucheada la actual diputada local Mariana Benítez Tiburcio, quien desde hace meses fue arropada por Claudia Sheinbaum.
Mariana Benítez ha sido señalada por ser copartícipe y defensora de la “verdad histórica” del ex presidente Peña Nieto y del ex titular de la Procuraduría General de la República, José Murillo Karam, sobre la desaparición de los 43 normalistas de Ayotzinapa.