Durante la presentación de la Unidad de Género y No Discriminación, la presidenta del Instituto Estatal Electoral y de Participación Ciudadana de Oaxaca (IEEPCO), Elizabeth Sánchez González, aseguró que a causa de las “pautas sociales y culturales” las mujeres que ejercen cargos de toma de decisiones enfrentan un contexto adverso.
Este escenario, explicó, es porque social, legal y culturalmente las mujeres son excluidas del poder público aún y que legalmente y en el discurso político se ha construido la paridad entre hombres y mujeres.
“Esto provoca, por un lado, violencia política contra las mujeres por razón de género y, por otro, la sensación en muchas mujeres de “no pertenecer”, de estar “fuera de lugar” o de no saber qué responder o cómo actuar ante las acciones o comentarios que las violentan cuando las minimizan, descalifican, ridiculizan, discriminan o agreden de manera física y/o sexual”.
En su intervención señaló que la igualdad en derechos es una condición imprescindible de las democracias contemporáneas y el objetivo de igualdad sustantiva entre mujeres y hombres es una causa primordial para el IEEPCO.
“Es por ello, que queremos avanzar en varios frentes para garantizar los derechos político-electorales de las mujeres, superar las brechas de género, y erradicar la violencia de la que siguen siendo víctimas”.
El 30 de mayo de 2020, el Congreso del Estado de Oaxaca reformó diversas disposiciones en materia de paridad y violencia política contra las mujeres en razón de género entre ellas, la ley electoral local. La nueva normativa tuvo como objetivo garantizar la participación de las oaxaqueñas en la política, así como el ejercicio de sus derechos electorales de forma paritaria y libre de violencia basada en el género.
Elizabeth Sánchez afirmó que esto es un desafío para el órgano electoral hacia dentro y es también un desafío de las autoridades electorales y de los otros actores políticos hacia afuera.
“Estoy convencida de que esta lucha, larga lucha que todavía tiene muchos tramos por delante, y que tiene que traducirse en un cambio formativo para estas generaciones. Deseo profundamente que algún día lleguemos a no necesitar las acciones afirmativas que hemos tomado, porque eso significará que hemos llegado a una democracia igualitaria, paritaria, como la que aspiramos”.
La presidenta del IEEPCO sostuvo que en el tema de la verificación de la paridad para los cargos de elección popular no hay un margen de concesión y en esto seremos absolutamente escrupulosas muy firmes porque así lo demanda la causa de la paridad, de la igualdad, y así lo demanda además la Constitución.
También aclaró que la Unidad de Género y No Discriminación se creó con el objetivo de transversalizar e institucionalizar la perspectiva de género en todas las estructuras, procesos y acciones del Instituto y en sus decisiones.
“Representa una respuesta para garantizar una vida libre de violencia política contra las mujeres mediante un trabajo formativo, preventivo y coordinado con otras instancias para reducir las brechas de desigualdad que aún persisten”, aseguró.
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