Juan Carlos Zavala
César se mudó recientemente al centro de la ciudad de Oaxaca, originalmente rentaba en San Martín Mexicapam, una de las agencias de la capital del estado, pero nunca imaginó que se enfrentaría al mismo problema o incluso peor, del suministro de agua potable.
Al igual que en San Martín Mexicapam el servicio puede tardar en llegar de un mes hasta dos meses. Sin embargo, la diferencia en el centro de la ciudad es que comprar agua potable a través del servicio privado de una pipa de agua es más costoso; mientras que pagaba alrededor de 90 pesos por mil 100 litros, ahora paga de 120 a 180 pesos, según la temporada: cuando son los meses de lluvia el precio desciende, y se dispara en la temporada de estiaje.
La escasez del líquido en la capital oaxaqueña ha provocado la irritación de los habitantes de algunas colonias de la ciudad. A finales de junio, por ejemplo, vecinos de la colonia José Vasconcelos bloquearon el boulevard Eduardo Vasconcelos, una de las principales vialidades, para exigir a las autoridades del gobierno del estado el suministro de agua potable. “No llega, pero sí la cobran”, expresaron los vecinos.
Los habitantes de la colonia Aurora, por su parte, bloquearon la circulación en el cruce de la calle de Crespo- Avenida Héroes de Chapultepec- Carretera del Cerro del Fortín – Avenida Venus. La exigencia era la misma, luego de más de un mes sin el servicio.
Cada vez menos agua
El director general del Sistema Operador de los Servicios de Agua Potable y Alcantarillado del Gobierno de Oaxaca (Soapa), Omar Pérez Benítez, reconoce que hay deficiencias y retrasos prolongados en el suministro de agua potable y acepta, que a quienes afecta más son a las zonas con la población más vulnerable.
“Sabemos el descontento de la ciudadanía por la carencia del agua, pero la recuperación de los pozos y manantiales están fuera de nuestro alcance, el estiaje se ha prolongado, sin embargo, es compromiso de este gobierno apoyar a la población”, asegura.
El funcionario sostiene que condiciones meteorológicas en donde han prevalecido las altas temperaturas impide que los mantos freáticos y manantiales de los que se abastece de agua la capital, se puedan recuperar.
“Lamentablemente los mantos freáticos y manantiales que surten del agua a la ciudad de Oaxaca no han podido recuperar sus niveles deseados ante la falta de precipitaciones, por lo cual se está atendiendo esta demanda de la población que más carece de vital líquido”.
Datos de la Soapa muestran que al inicio del año 2023 se recibían 350 litros de agua por segundo de los pozos y manantiales que opera este organismo; cantidad que bajó 280 litros por segundo los que se reciben para su distribución.
También detallan que para la ciudad de Oaxaca y municipios en los que tiene presencia Soapa, se requieren mil 100 litros por segundo “para una óptima y constante distribución, situación que es muy difícil de alcanzar por la falta de lluvias que no permiten la recuperación de los mantos acuíferos”.
Oaxaca es uno de los estados del país con el mayor número de habitantes sin acceso al agua entubada, de acuerdo con el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI). El 42.15 por ciento de las viviendas en la entidad tienen agua de manera diaria, el 21.86% cada tercer día, 22.13% dos veces por semana, 13.40% esporádica y 0.46 no especifica.
Los datos del INEGI, sin embargo, contrastan con los datos que da a conocer la Red Mexicana de Cuencas (Remexcu) y en los que advierte que en Oaxaca hay un total de 350 mil 861 viviendas. De esas, son 319 mil 752 (91.13%) las viviendas que disponen de agua entubada. De todas las viviendas son 247 mil 683 (70.59%) las que disponen de agua entubada y se abastecen del servicio público. Es decir, que 29.41% del agua que se distribuye no lo hace a través del sistema público de agua.
Además, señala que de todas las viviendas, independientemente que sean o no las que se abastecen del sistema público, son 185 mil 586 (52.89%) las que disponen de tinaco; mientras que 71 mil 97 (20.26%) disponen de cisterna o aljibe.
Respecto de las viviendas que no disponen de servicios del agua, precisa que 28 mil 829 (8.22%) las que no disponen de agua entubada, 78 mil 82 viviendas (22.25%) no disponen de drenaje; esto último, puntualiza, es importante por la potencial contaminación a los acuíferos. Y finalmente, que son dos mil 551 viviendas (0.73%) que no disponen de energía eléctrica, agua entubada, ni drenaje; lo que significa que no pueden tener acceso al sistema público.
La Remexcu agrega que hay una población total de un millón 301 mil 87 en Oaxaca en los acuíferos con disponibilidad media anual de agua subterránea en números negativos en alrededor de 176 municipios y potencialmente abasteciéndose de estos acuíferos. De esta población, de 65 años y más son 124 mil 176 (9.54%), mientras que de 0 a cinco años son 144 mil 66 (11.07%); siendo entre ambos 20.61% de la población en estos acuíferos.
Por ello, advierte que la población total de Oaxaca es de 4 millones 120 mil 683, lo que representa 31.57% de la población en riesgo por acuíferos sobreexplotados.
Según la propia información de Conagua, dice, 2 mil 430 millones 412 mil 412 de metros cúbicos faltantes (negativos) en la disponibilidad media anual de agua en esos acuíferos; 6 mil 882 millones 600 mil metros cúbicos anuales de descargas naturales comprometidas; 13,383.4 de hectómetros cúbicos de recarga media anual; y son 4 mil 76 millones 667 mil 320 metros cúbicos el volumen de extracción de aguas subterráneas.
También señala que la población que no tiene drenaje en 78 mil 82 viviendas, podría estar contaminando los acuíferos para el resto de la población.
“La población se encuentra en riesgo debido a una contaminación de los acuíferos por medio de contaminación a los mismos, ya registrada en otros lugares por ejemplo en Jalisco, es casi una tercera parte de la población del estado; mientras que es importante la cantidad de gente que continúa extrayendo agua en pozos ya semiagotados o con reservas en riesgo de agotarse.
“Suponiendo que la mayoría de las personas sean abastecidas con agua de esta fuente, es una importante cantidad que podría rondar entre un 10% y la totalidad del grupo de riesgo por lo menos, y de la población total del estado”.
Mantos freáticos se agotarán, advierte el IPN
Un estudio realizado por investigadores del Centro Interdisciplinario de Investigación para el Desarrollo Integral Regional (Ciidir) del Instituto Politécnico Nacional (IPN), advierte que los mantos acuíferos que abastecen de agua potable a más de un millón de personas en la región Valles Centrales de Oaxaca se agotará a finales de los años 30.
La investigación señala que desde el año 2013 se ha intensificado el descenso en sus niveles de agua e incluso sus efectos ya se resienten en la capital oaxaqueña y en los 23 municipios conurbados. La crisis, sin embargo, abarcará a los 103 municipios que conforman esta región del estado.
El acuífero de Valles Centrales está integrado por un sistema de cuatro microcuencas ubicadas en Coyotepec, Tlacolula, Oaxaca y Ocotlán, parte de la cuenca del río Atoyac. En el acuífero se han identificado 143 núcleos agrarios. La región consume anualmente 121.8 millones de metros cúbicos de agua.
Estos estudios y monitoreos se realizan desde hace más de 20 años y a través de los cuales, estiman que los niveles de los mantos acuíferos descenderán hasta en 50 metros, principalmente aquellos que están en la zona de los municipios de la Villa de Zaachila y Zimatlán.
Salvador Belmonte Jiménez, quien lidera estas investigaciones, advierte que en los valles de Etla y Tlacolula de Matamoros el descenso actualmente ha llegado hasta los 10 metros.
Las causas se deben a que la intensidad y cantidad de las lluvias ha disminuido y lo cual ha sido más perceptible a partir del año 2013. Pero también al cambio uso de suelo en las zonas de recarga de los mantos acuíferos, la disminución de bosque, aumento en la zona de pastizal, de cultivo, y la zona urbana. A esto se agrega, que el acuífero es vulnerable, susceptible a la contaminación y a afectar drásticamente por cantidad, es decir, que los volúmenes de agua disminuyan.
El especialista explica que el agua que se filtra al acuífero es mucho menor e impide que los niveles freáticos se recuperen y que cada vez tenga menos agua y a eso, hay que sumarle la contaminación en el río Atoyac, una de las principales “fuentes puntuales” para la recarga de los mantos acuíferos.
La información proporcionada por la Soapa, menciona que la ciudad de Oaxaca se abastece de agua potable en un 98 por ciento de la explotación de 23 pozos profundos en operación y 48 en existencia, a través de los cuales se sustrae de los mantos acuíferos.
El principal manantial que suministra del vital líquido a la población es San Agustín Etla; el manantial de San Felipe del Agua, surte sólo agencia municipal, y el de San Andrés Huayapam, es consumida por el municipio.
“Los manantiales están a punto de convertirse en una leyenda, porque se ha detectado un proceso de desertificación desde el municipio San Francisco Ixtlahuaca (donde nace el Río Atoyac) hasta la ciudad de Oaxaca”, afirma la dependencia estatal.
Actualmente Soapa suministra agua a la ciudad de Oaxaca y parcialmente a 10 municipios conurbados, abastece a aproximadamente 800 mil habitantes y “produce” 16 millones de litros anuales de agua potable.
Para Juan José Consejo Dueñas, presidente del Instituto de la Naturaleza y la Sociedad de Oaxaca (INSO), la escasez de agua ya es una realidad y es claro el desabasto de agua potable.
Estima que el suministro de agua está entre los 200 y 500 litros por segundo, cuando se plantea que lo ideal debe ser 1 mil 500 litros por segundo y calculó que el periodo de vida del acuífero de Valles Centrales oscile entre los 15 o 20 años. “Menos de los 50 años que tiene proyectado el Gobierno de Oaxaca”, apunta.
El Fondo Mundial para la Naturaleza (WWW-México, por sus siglas en inglés) señala que los retos para el acuífero de los Valles Centrales de Oaxaca son contener el crecimiento urbano desordenado y aumento en la presión sobre los recursos naturales, detener la sobre extracción de mantos freáticos.
Además de tomar acciones para resolver la alta de abastecimiento de agua, la disminución de la superficie forestal por cambios de uso del suelo, combatir la presencia de plagas y enfermedades forestales, la migración de habitantes de las comunidades hacia la zona urbana, la degradación y desertificación de la capa vegetal en las cordilleras, la carencia de ordenamientos ecológicos y territoriales y la vulnerabilidad al cambio climático y falta de planes de adaptación.
En Oaxaca tres empresas extraen agua para uso industrial equivalente a una tercera parte de la que destina para consumo humano en el estado, según datos de la Comisión Nacional del Agua (Conagua) y de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM).
Industria en Oaxaca recibe 3 veces más agua que el suministro de Soapa a 10 municipios
La información oficial también muestra que sólo un puñado de empresas recibe o tiene permiso para explotar hasta tres veces más del agua potable que Soapa destina para 10 municipios, incluida la capital del estado, en la región Valles Centrales.
Mientras que la Soapa “produce” 16 millones de litros anuales de agua potable para esta decena de municipios, 169 entre empresas y particulares pueden explotar cerca de 60 millones de metros cúbicos al año.
Las concesiones para la explotación de este recurso natural en la entidad oaxaqueña fueron otorgadas durante los gobiernos del PRI y el PAN encabezados por los ex presidentes Carlos Salinas de Gortari, Ernesto Zedillo Ponce de León, Vicente Fox Quezada y Enrique Peña Nieto; y las empresas beneficiadas son la Compañía Cervecera del Trópico S. A. de C. V., Ingenio Adolfo López Mateos S. A de C. V. y BIO PAPPEL SCRIBE S. A. de C. V., todas ellas con sede en San Juan Bautista Tuxtepec.
El listado de concesiones para el uso industrial del agua en Oaxaca de la Conagua, se destinan para este fin 59.8 millones de metros cúbicos en un total de 194 concesiones otorgadas a empresas privadas y particulares. Para uso industrial se extraen 7.5 millones de metros cúbicos de aguas superficiales, 26.6 millones de metros cúbicos de aguas subterráneas, 19.9 millones de metros cúbicos de agua ubicada en zonas federales y 5.6 millones de metros cúbicos del agua tratada de las descargas residuales.
Los 59.8 millones de metros cúbicos de extracción de este recurso natural cada año es equivalente a aproximadamente un tercio de lo que se destina para consumo humano anualmente en los 571 municipios del estado. Y de estos, 57.1 millones de metros públicos los explotan cada año únicamente tres empresas instaladas en San Juan Bautista Tuxtepec, municipio que pertenece a la región de la Cuenca del Papaloapam del estado de Oaxaca.
En total la Compañía Cervecera del Trópico S. A. de C. V. extrae anualmente 23 millones 500 mil 800 metros cúbicos anualmente, el Ingenio Adolfo López Mateos 18 millones 513 mil 360 metros cúbicos y BIO PAPPEL SCRIBE S. A de C. V. 15 millones 120 mil metros cúbicos.
La Compañía Cervecera del Trópico inició operaciones en Tuxtepec en el año 1984 durante el sexenio de Miguel de la Madrid Hurtado y es considerada por la propia empresa como la segunda planta más grande del Grupo Modelo. Aunque empezó a trabajar en Oaxaca a mediados de los ochenta, las concesiones para la explotación del agua se formalizaron hasta el año 2003 en el gobierno de Ernesto Zedillo y en 2018, ya en el gobierno de Enrique Peña Nieto, recibieron una segunda concesión de la Conagua.
En tanto que la construcción del Ingenio (azucarero) Adolfo López Mateos, según la propia empresa, inició en 1965 y se terminó de construir en 1968 de acuerdo a un protocolo de financiamiento entre los Gobiernos de Francia y México, en el gobierno de Gustavo Díaz Ordaz. Fue operado por Azúcar, S.A. de 1968 a 1988, a partir de esa fecha fue adquirido por el Grupo PIASA. Tiene una capacidad instalada de producción de nueve mil toneladas por día y una producción de azúcar de mil toneladas diarias. Su zona de abasto es de más de 23 mil hectáreas de sembradíos de caña, las cuales son cultivadas por más de dos mil 900 productores cañeros. La empresa presume que por su eficacia y rendimiento se ubica en los primeros lugares nacionales e internacional, que es puntal de desarrollo económico y que está valuada en alrededor de dos mil millones de pesos.
La primera concesión para la explotación del agua entregada por la Conagua fue en el año 1995 en el gobierno de Carlos Salinas de Gortari, posteriormente recibieron otras dos concesiones: una en 1999 en el gobierno de Ernesto Zedillo y una en 1995 en el gobierno de Vicente Fox. Es decir, al igual que la Compañía Cervecera del Trópico, el Ingenio Adolfo López Mateos, extrajo agua para uso industrial durante varios años sin contar con las concesiones de agua por el gobierno de México.
BIO PAPPEL ESCRIBE, por su parte, tiene la concesiones de agua entregadas por la Conagua más reciente y las cuales recibió en el año 2016 durante el gobierno del ex presidente Enrique Peña Nieto.
Ciudadanos no pagan el agua
La Comisión Estatal del Agua para el Bienestar (Ceabien) asegura que 80 mil personas adeudan el pago del servicio de agua potable, “lo que disminuye la capacitación de ingresos para el mantenimiento de la red hidráulica en el estado”.
Esta dependencia, también apunta que el costo por metro cúbico de agua oscila entre los 6.06 y 7.42 pesos. Esto, por el pago de la nómina de los trabajadores, gastos de operación en conducción y distribución, así como el número de los usuarios registrados y la tarifa aplicable a los organismos.